Actualmente, los clientes del sistema financiero en Costa Rica pueden realizar diversas consultas por las aplicaciones móviles, tal como solicitar préstamos, con tan solo algunos clics. Pero la transformación digital no va mucho más allá de eso. Para formalizar el préstamo, los trámites vuelven al antiguo sistema en papel.

Debido a la legislación, el sector financiero viene invirtiendo tan solo en iniciativas enfocadas en el front-end, como canales, aplicaciones móviles y atención. Las operaciones de back-end, o de retaguardia, no funcionan de forma automatizada o con el mínimo de interacción manual.

El sistema financiero en Costa Rica todavía no cuenta con una legislación o controles que promuevan la transformación digital, con nuevos modelos de negocio más ágiles y de menor costo, como los adoptados por las fintechs.

De este modo, las plataformas que actúan como intermediarias entre el sector financiero y el cliente final ofrecen herramientas para que el mismo compare ofertas y escoja la institución que ofrezca las mejores condiciones, pero que no procesan los créditos directamente.

Lo mismo ocurre con las plataformas puestas a disposición por fintechs que hacen el análisis de crédito en minutos y le informan a la institución financiera si el cliente es adecuado para recibir un préstamo. Toda la agilidad inicial se pierde cuando la formalización del proceso entra en “modo manual”.

La digitalización de los procesos internos

En Costa Rica, el proyecto de digitalización del sistema financiero debe tomar en consideración la transformación del relacionamiento con el cliente, de las operaciones y de los modelos de negocio, replanteándose procesos internos y cuestiones de seguridad y, también, tomando en consideración los beneficios provenientes de la implantación de un sistema de administración de documentos, como:

Beneficios financieros – el costo de administrar, analizar y compartir de forma manual millones de documentos que forman parte de las actividades bancarias es muy alto. Con la digitalización y soluciones de administración documental, este costo es mucho menor.

Menos tiempo – enviar documentos en papel por correo no puede existir más en el sistema financiero. Además de ahorrar papel, la administración automatizada de documentos agiliza todos los procesos.

Fidelización del cliente – la digitalización del sistema financiero es capaz de transformar el viaje del cliente, adecuando las ofertas a sus necesidades de acuerdo con su perfil, y entregando la información que este precisa de forma más ágil.

Auditorías – para mantener la conformidad, un banco precisa realizar auditorías internas y externas, garantizando que se están cumpliendo las normas del sector y, también, mantener un registro preciso de todas las transacciones financieras. De forma manual, o con soluciones inadecuadas de administración de documentos, será muy difícil comprobar la adhesión a las normas.

Una alianza agiliza el sistema financiero

Cuando una institución financiera decide lidiar internamente con las necesidades de la administración de documentos, las inversiones en tecnología y entrenamiento de personal son altas, inclusive si las soluciones seleccionadas no son las mejores del mercado y, consecuentemente, que tengan un costo inicial más bajo.

Contar con un aliado que ofrezca una solución completa de administración documental desarrollado específicamente para responder a los requisitos del sistema financiero permite aumentar la eficiencia, productividad y enfrentar los desafíos de la digitalización.